Empleado se busca. Pagamos el mejor salario del mercado. Flexibilidad total de horarios. Podrá trabajar desde donde quiera y tomarse todas las vacaciones que necesite. Pero solo buscamos personas fuera de serie. Si este no es el empleo de sus sueños ni se postule.

¿Podría ser este el tipo de anuncio que empezaremos a ver cada vez con más frecuencia? En un mercado que muta a gran velocidad solo las empresas que se adapten sobrevivirán. Para ello necesitarán contar con talento y flexibilidad.

Actualmente, la cultura de los procesos está dando paso a la cultura de la creatividad, la autodisciplina y la libertad con responsabilidad. La eficiencia de una compañía dependerá de contar con personas talentosas y altamente motivadas trabajando con un entendimiento cabal del contexto.

Los procesos y las reglas solo sirven si están orientados a conducir una ejecución eficiente manteniendo la creatividad y la flexibilidad. El control es importante cuando se tiene a la persona equivocada para esa posición. No importa ya cuánto te esfuerzas sino los resultados alcanzados.

¿Cómo es el espacio de trabajo para esta nueva cultura?

Flexible: de fácil reconfiguración.
Democrático: porque ofrece disponibilidad de espacios para todos, donde la luz y las vistas son un privilegio de la mayoría.
Sin jerarquías: las posiciones se definen en función de la actividad y no por el cargo de las personas.
El puesto de trabajo es toda la oficina: dado que es imposible resolver la multiplicidad de actividades de un persona durante la jornada laboral en un único puesto de trabajo, será importante contar con un set de espacios adecuado para cada actividad, que estará disponible para quien lo requiera.
Saludable y motivante: porque trabajamos mejor cuando nos sentimos mejor. Espacio físico y virtual: la oficina se extiende más allá de las paredes.

En poco tiempo más, lo que entendemos por lugar de trabajo habrá cambiado para siempre.

Víctor Feingold
Arquitecto
Director FM & WORKPLACES