| La eficiencia y el uso racional de la energía en la construcción contribuyen con múltiples beneficios al desarrollo sostenible: además de producir un ahorro energético directo, ayudan a proteger el medio ambiente y a garantizar el suministro a todos los usuarios. Todo esto, sin reducir el confort dentro de las edificaciones y aumentando la calidad de vida de sus ocupantes. Un adecuado aislamiento térmico sobre la parte ciega de la envolvente puede resultar una manera muy eficaz de lograr este objetivo.
Un edificio sustentable es un edificio cuyo diseño (incluyendo sus métodos constructivos) reduce de manera significativa, o mejor aún, elimina, el impacto negativo que las edificaciones tienen sobre el medio ambiente y sus habitantes. Se trata de alcanzar la sustentabilidad ecológica y ambiental, teniendo también en cuenta las dimensiones económica y social.
Hay cinco áreas principales dentro del “diseño sustentable”:
1. Elección y planificación del sitio del edificio.
2. Consumo racional del agua.
3. Uso eficiente de la energía.
4. Conservación de materiales y recursos.
5. Cuidado de la calidad del aire interior.
Los edificios sustentables producen ahorros significativos a través de la reducción de gastos operativos durante la vida útil del edificio. El diseño sustentable de edificios aumenta el valor del inmueble, disminuye la vacancia y aumenta el precio de los alquileres. Probablemente la inversión inicial sea un poco mayor, pero el gasto de mantenimiento y operación es mucho menor. Además, mejora el bienestar de los ocupantes, aumenta la productividad y reduce el impacto sobre el consumo de los recursos naturales.
De todos los aspectos que orientan al diseño sustentable, abordaremos aquí el uso eficiente de la energía, considerando el aislamiento térmico sobre la parte ciega de la envolvente para lograr un ahorro energético. Se ha demostrado que los edificios que cuentan con un aislamiento eficaz en sus muros perimetrales logran una disminución del consumo de energía a partir de la reducción en la necesidad y el uso más eficiente de los recursos naturales renovables y de los no renovables.
La propuesta para el uso de revestimientos térmicos consiste en aumentar el aislamiento de los muros perimetrales ciegos sin alterar la estética del proyecto arquitectónico. Este recurso debe complementarse con ventanas herméticas y otros métodos adicionales; de esta manera se podrá obtener un mayor confort térmico.
Confort y aislamiento térmico
• Confort térmico
Para que exista la sensación de confort térmico en un ambiente, los muros no deberían estar fríos. La diferencia entre la temperatura superficial interior del muro exterior y el centro del ambiente no debe superar los 2,5°C como máximo para el Nivel B . Si esta condición se cumple, se evitará la condensación sobre el paramento del muro exterior y se obtendrá una temperatura homogénea en todo el ambiente.
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