| La gestión administrativa, la productividad y los indicadores de desempeño, emergen como los factores clave para el futuro de las organizaciones del siglo XXI. Por ello es indispensable conocer e identificar las últimas tendencias, los mejores proveedores y las innovaciones en materia de gestión, a fin de optimizar la competitividad y el rendimiento de las empresas.
Un término crucial, que ha tomado mayor fuerza dentro de las empresas modernas y que actualmente se ha trasladado a múltiples entornos, es Facilitiy Management. Este concepto -comúnmente utilizado pero, en algunas oportunidades, poco explorado-, se refiere a la disciplina encargada del mantenimiento de infraestructuras y activos tales como equipos, maquinaria, etc., que utiliza la integración de servicios para obtener resultados óptimos y la mejor gestión de los procesos.
Debido al gran panorama que abarca el concepto de Facility Management, esta disciplina empresarial provee las medidas y recursos necesarios para que los líderes corporativos identifiquen las oportunidades de crecimiento y superación de obstáculos que se desprenden de la globalización, como un fenómeno de rápido desarrollo.
Asimismo, este término cada vez más aplicado en el sector empresarial, cubre la toma de decisiones que permitirá la construcción de un entorno más productivo, seguro, eficiente y sostenible dentro de la compañía. Con la implementación de esta herramienta, los empresarios del siglo XXI tienen la posibilidad de planear el futuro de la organización que lideran, mejorando la gestión administrativa y aumentando el valor y los indicadores de desempeño tanto cuantitativos como cualitativos.
La gestión administrativa de una organización debe tener en cuenta los costos fijos de la operación y cómo lograr minimizarlos sin perjudicar ni arriesgar el desempeño empresarial y sus resultados. Es decir, debe reconocer las fortalezas y las debilidades de aquellos procesos que se pueden desarrollar en el interior de la compañía para tercerizar funciones de manera parcial o total; mientras que desde la óptica de la gestión administrativa, el asignar recursos bajo modelos de administración centralizada representa un reto y un desafío debido a la cantidad de personal, material, supervisión y coordinación que implica el mantenimiento de la infraestructura y los activos.
Focalizando el tema hacia el área operacional, los retos para las empresas parecen ser cada vez mayores. A esto contribuyen el entorno económico y la asignación de recursos bajo modelos que integran la operación, la gestión y la implementación de diferentes servicios en un solo sistema de administración centralizada de instalaciones y equipos mediante la integración de múltiples disciplinas, junto con el personal, los procesos y la tecnología necesarios para asegurar el funcionamiento del entorno.
Las compañías de los sectores de servicios, industria, minería, energía, comunicaciones, comercio y salud, entre otras, deben contemplar el diseño, la administración y la implementación de soluciones integrales de servicios. Al implementar soluciones exhaustivas, estas compañías pueden acercarse a la consecución de sus objetivos y lograr así el aumento de su productividad junto con una mayor eficiencia operacional.
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