En los casos en los que se intenta transformar un inmueble convencional en un proyecto sostenible, las estrategias que encontramos al tope de la lista son aquellas que prometen reducciones significativas en el consumo de energía. Las modificaciones en el sistema de iluminación, los reacondicionamientos del sistema de aire acondicionado y los programas de reciclaje agresivos son algunos de los proyectos que pueden provocar un impacto sustancial. Pero los Facility Managers no deben olvidarse de que algunos cambios más pequeños también pueden tener ventajas significativas y pueden ser más viables que proyectos más grandes, cuando de ahorro y conservación de recursos se trata.

Los sanitarios de uso público, como los que se encuentran en oficinas, centros deportivos y de recreación, centros comerciales, establecimientos escolares, hoteles, restaurantes, etc., debido a que son frecuentados por grupos de usuarios muy diversos y no siempre están periódicamente vigilados, por lo general se ven expuestos a pérdidas de agua por mal uso que pueden llegar a ser considerables.
Por esto es de gran importancia dotarlos de un nivel de equipamiento apropiado para el grupo de usuarios que los va a utilizar, ya que debemos reducir el derroche de agua y energía y la falta de higiene y minimizar las operaciones de mantenimiento.
Los dispositivos sanitarios han evolucionado en su fabricación, tanto por los materiales utilizados como por el diseño y por la incorporación de nuevas tecnologías que permiten el ahorro de agua en los locales sanitarios de uso público, algunos de los cuales se pueden adaptar a los elementos ya existentes de una forma sencilla.

1. Mecanismos para grifería

· Griferías temporizadas o de cierre automático
o Griferías temporizadas: son aquellas que se accionan pulsando un botón y dejan salir el agua durante un tiempo determinado, transcurrido el cual se cierran automáticamente. En edificios públicos, la reducción en el consumo se estima entre un 30% y un 40%. Es importante calibrar en todos los grifos el caudal y tiempo de apertura más cómodos para los usuarios; no menos relevante es un adecuado mantenimiento de los mismos, que garantice su buen funcionamiento. Se estima que un caudal de entre 6 y 8 l/min durante 6-9 segundos es adecuado para un uso normal.

o Grifería electrónica: dentro de las opciones de grifería de cierre automático, las de tipo electrónico son las que ofrecen las máximas prestaciones desde el punto de vista de la higiene y el ahorro de agua. En estos dispositivos, un módulo electrónico (en general alimentado con pilas) controla el caudal de agua en función de las necesidades concretas de cada caso lográndose ahorros de hasta un 60% en el consumo anual de agua. La apertura se activa cuando se colocan las manos bajo el grifo de salida de agua.
El potencial de ahorro que se consigue proporciona unos tiempos de amortización bastante cortos.

· Dispositivos para adaptar grifos ya existentes
Se pueden mejorar los grifos existentes con opciones sencillas y económicas:
o Aireador perlizador: es un dispositivo que mezcla aire con el agua, incluso cuando hay baja presión, de manera que las gotas de agua salen en forma de perlas.
Sustituyen a los filtros habituales de los grifos y a pesar de reducir el consumo, el usuario no tiene la sensación de que proporcionen menos agua. Los aireadores perlizadores permiten ahorrar aproximadamente un 40% de agua y energía en los grifos tradicionales.

o Limitador de caudal: los limitadores de caudal reducen la cantidad total de agua que sale del grifo. Dado su diseño, funcionan correctamente a las presiones de servicio habituales (entre 1 y 3 bar), pero no garantizan que se mantengan unas óptimas condiciones de servicio a bajas presiones.

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